Cuando Puyol secó a Figo
Para un zaguero es mucho más difícil brillar que para un delantero. La razón es obvia; el gol. En los partidos importantes lo que queda para el recuerdo es quien marcó el gol de la victoria. También quedará en la rutina aquella jugada, aquel control o incluso aquella parada milagrosa de un portero. Lo que diferencia a un defensa del resto de posiciones es que sólo permanecerá en el recuerdo […]