Archivos

Evasión o victoria (1ª parte)

Fútbol y cine son como agua y aceite. Sí, hay un buen puñado de largometrajes que tienen el deporte del balón como argumento principal. Desde ‘Quiero ser como Beckham’, ‘Goool’, ‘Kes’, ‘Once pares de botas’ o la legendaria ‘Victory’, o lo que es lo mismo ‘Evasión o victoria’. Incluso hay películas que si bien no tienen el fútbol como eje sí que se sirven de él para trazar una historia. En la oscarizada ‘Volver a empezar’ José Luis Garci, tan apasionado del cine como del fútbol, cuenta la historia de un ex jugador del Sporting de Gijón que se marcha al exilio tras la Guerra Civil y que vuelve a España cuarenta años más tarde convertido en Premio Nobel de Literatura.

Pero lo cierto es que fútbol y cine nunca han casado. El inventario puede ser amplio, pero la calidad no le acompaña. En un principio las artes escénicas siempre renegaron del fútbol. El deporte perennemente ha sido visto por la izquierda como un pasatiempo creado por las élites para tener entretenido y alienado al pueblo. Para la derecha el cine es concebido como un lugar turbulento, contestatario y contracultural. Ha tenido que pasar más de una centuria para que esas aristas se hayan moldeado –que no eliminado- y que fútbol y cultura hayan decidido dejar de mirarse de lado.

Pero hay una causa de fuerza mayor que hace dificultosa la unión de los dos grandes elementos de ocio de nuestro tiempo. Y esa no es otra que la belleza.

Jean Luc-Godard consideraba que “en la avalancha de imágenes filmadas aparece la estrella y su gloria, no el hombre y su miseria”. Quizás el cine pueda reflejar las ansias de una grada enfervorizada, la pasión de los niños frente a sus ídolos o el afán de superación de una chica que derriba muros que parecían inquebrantables. Puede que a través del fútbol se expliquen problemas sociales o políticos, hechos históricos, dramas o amores de adolescencia. Puede. Pero lo que el cine no ha podido lograr es captar la belleza y la pureza del juego.

Hay grandes películas que captan la esencia del baloncesto, el béisbol, las carreras de coches y, especialmente, el boxeo. El género pugilístico ha dado maravillas al séptimo arte. Todos estos deportes tienen la particularidad de la congelación del tiempo. Son deportes que viven del reloj. El cine puede expandir o contraer a su antojo el espacio-tiempo para dirigir el foco al momento esencial que quiere resaltar.

En las películas de fútbol hay un derrumbe general cuando el cineasta se adentra en la belleza del juego. El fútbol es un deporte corrido en el que el único orgasmo es el gol. La incertidumbre del fútbol estriba en saber si entrará o no entrará la pelota. El cine puede estirar esa secuencia hasta el infinito, pero lo que es incapaz de lograr es recrear toda la atmósfera, toda la tensión y toda la incertidumbre que se produce hasta que llega ese momento mágico. De hecho el fútbol es de los escasos deportes, sino el único, que es capaz de mantener su ser incluso si el resultado se torna en inamovible.

Quizás la dificultad estribe en que se juega con los pies, y los pies están a años luz de la cara, que es el más importante de los utensilios de trabajo de un actor. O tal vez el problema es que el fútbol es tremendamente coral y las estrellas se difuminan en la pantalla. O igual es que al ser un deporte poco agraciado en Estados Unidos nunca haya sido tomado en serio por Hollywood. Pero el caso es que fútbol y cine no consiguen filmar una verdadera obra de arte.

Si bien ninguno de estos infructuosos intentos ha logrado pasar a la posteridad con una retahíla de premios, hay una película que está grabada a fuego en las mentes de todo buen aficionado al fútbol. Y lo cierto es que en ‘Evasión o Victoria’ el juego tampoco es bello o armonioso, de hecho, abundan las escenas cómicas más propias de un juego infantil que de un partido a vida o muerte.

‘Evasión o victoria’ es una historia de presos que preparan una gran fuga, con la particularidad de que la fuga va a ser perpetrada mientras se juega un partido de fútbol. La película se asemeja en temática, escenarios y hasta en el tipo de música a ‘La gran evasión’, un drama bélico que convirtió a Steve McQueen y a su motocicleta en estrellas mundiales. Pero la particularidad de ‘Evasión o victoria’ es que se trata de una buena, una muy buena película en la que se juega al fútbol. Es una señora película. El director es John Huston (2 premios Óscar y 12 nominaciones) y los actores principales son Michael Caine (2 premios Óscar y 4 nominaciones) y Sylvester Stallone (3 nominaciones).

Pero es que además, y aquí está el intríngulis, actuaban Bobby Moore, Paul Van Himst, Osvaldo Ardiles o Kazimierz Deyna. Para los menos puestos en historia fílmica e historia futbolística es como si hoy dirigiese ‘Evasión o Victoria’ Martin Scorsese, actuasen Daniel Day-Lewis y Bradley Cooper y la película contase con los participación especial de Sergio Ramos, Kevin de Bruyne, Paul Pogba o Mohamed Salah.

Y también actuaba Pelé.

Camisetas para la historia. 'Evasión o Victoria': la mejor ...
Los Aliados

— EVASIÓN O VICTORIA —

‘Evasión o victoria’ está basada en hechos reales. En 1942 lo que hoy es Ucrania estaba ocupada por la administración nazi. Entre los miles de prisioneros se encontraban varios ex jugadores del Dinamo de Kiev, el equipo de fútbol más importante del país. Ocho de aquellos futbolistas constituyeron un club denominado FC Start al que pronto se incorporaron otros prisioneros. Empezaron a jugar encuentros contra sus carceleros cosechando victoria tras victoria. Con cada uno de esos triunfos se corría la voz entre la población ucraniana y se socavaba la autoridad alemana.

Tras siete derrotas consecutivas, los gerifaltes nazis decidieron formar un equipo con los mejores jugadores disponibles dentro de las filas del ejército. La idea era localizarlos entre la flor y la nata militar, para así poder derrotar a aquellos futbolistas de élite que ahora parecían esqueletos en movimiento. Antes de comenzar el choque, el oficial de las SS al mando advirtió a los ucranianos de que o se dejaban vencer o acabarían todos fusilados. A pesar de la terrible advertencia, los jugadores del FC Start saltaron al campo, se negaron a realizar el saludo nazi y se dispusieron a llevarse la victoria. Los ucranianos ganaron el partido por 5-3 con el beneplácito del público y la ira de las autoridades nacionalsocialistas.

Una semana más tarde la Gestapo detuvo a todos los jugadores acusándolos de ser espías soviéticos. Fueron enviados a un campo de concentración de los que únicamente tres de ellos sobrevivirían al fin de la II Guerra Mundial. Después, y aunque los propios sobrevivientes jamás se declararon comunistas, la URSS se apropió de la historia y la hizo suya como ejemplo de lucha ante el nazismo.

En ‘Evasión o Victoria’ la historia está dulcificada. Ambientada en un campo de prisioneros en el año 1943, el oficial alemán Von Steiner (Max von Sydow) decide organizar un encuentro de fútbol y rememorar los tiempos anteriores a la guerra cuando era un famoso futbolista alemán. Con ese propósito convence al inglés John Colby (Michael Caine) para que organice y entrene a un equipo entre los prisioneros. Colby acepta, pero exige que, en virtud del honor y de la justicia deportiva y para garantizar una igualdad de oportunidades, sea imprescindible aumentar las raciones de los prisioneros. Von Steiner, que encarna el estereotipo del militar de la Wehrmacht que aborrece a los nazis (el mito del nazi bueno), acepta gustoso en una muestra de decencia y caballerosidad.

Es entonces cuando los prisioneros, liderados por el estadounidense Robert Hatch (Sylvester Stallone), planifican una fuga que tendría lugar en el descanso del encuentro. El choque se iba a disputar en el parisino recinto de Colombes, por entonces un majestuoso estadio que en 1938 había albergado la final del Mundial. Para la fuga contarán con la ayuda de la resistencia francesa liderada por Reneé (Carole Laure), quien es la encargada de dirigir la excavación de un túnel de escape en los vestuarios del estadio.

Evasión o victoria (1981) - Filmaffinity
Cartel original de la película

A pesar de que en el descanso los aliados van perdiendo con claridad (4-1) y de que la fuga está preparada, los chicos se auto convencen de la victoria y consideran que, más allá de sus vidas, lo que está en juego es su honor, por lo que deciden no escapar y volver al césped para lograr la victoria. En un final hollywoodiense, la parada de un penalti de Hatch y un precioso gol de chilena de Luis (Pelé) hacen que el resultado pase de un posible 5-3 a favor de los alemanes a un grandilocuente 4-4. El público que abarrota el estadio, y que poco antes entonó la marsellesa a grito pelado con un palco lleno de oficiales nazis (clara mención a ‘Casablanca’), invade el terreno de juego y en el tumulto los futbolistas aprovechan para escapar dando por concluida la película.

‘Evasión o Victoria’ fracasó en Estados Unidos pero se convirtió de inmediato en un éxito de taquilla en Europa y buena parte de Sudamérica. Recaudó el triple de lo que había costado. Fueron cerca de dos horas de metraje de los que 30 minutos se dedicaron al partido de fútbol. Era 1981. Cada cierto tiempo la rumorología habla de una segunda parte o de un ‘remake’ con los ídolos del momento. Pero el caso es que casi cuatro décadas más tarde no se ha vuelto a hacer una película futbolera tan exitosa como ‘Evasión o victoria’.

Y eso que para llevarla a cabo hubo que superar unas cuantas vicisitudes.

Pero eso queda para la segunda parte.  

Como aperitivo, os dejo con la ficha técnica del partido.

—FICHA TÉCNICA—

Estadio de Colombes (París) 15-VIII-1943. 50.000 espectadores. Tarde soleada.

ALEMANIA 4-4 ALIADOS

Alemania

1. Schmidt (Laurie Sivell)

2. Kuntz

3. Reinhardt

4. Baumann

5. Kuntz II

6. Kuntz III

7. Becker

8. Kuntz IV

9. Bronte

10. Schmidt (Robin Turner)

11. Albrecht

Aliados

1. Robert Hutch (USA) Sylvester Stallone

2. Michael Fileu (BEL) Paul Van Himst

3. John Colby (ING) Michael Caine

4. Pieter van Beck (HOL) Co Prins

*sustituido en la segunda parte por Gunnar Nilsson (NOR) Hallvar Thoresen

5. Dough Clure (ING) Russell Osman

6. Terry Brady (ING) Bobby Moore

7. Arthur Hayes (ESC) John Wark

*sustituido en la segunda parte por Paul Wolchek (POL) Kazimierz Deyna

8. Carlos Rey (ARG) Osvaldo Ardiles

9. Sid Harmor (ING) Mike Sumerbee

10. Luis Fernández (GBR) Pelé –Aunque brasileño, en la película Pelé hace de súbdito de una de las colonias del Imperio Británico

11. Eric Borge (DIN) Soren Lindsted

Goles

1-0 (min.14) Albrecht

2-0 (min.35) Bronte

3-0 (min.31) Baumann, de penalti

4-0 (min.41) Albrecht

4-1 (min.44) Brady, tras centro de Borge

4-2 (min.52) Rey, tras driblar a medio equipo alemán

4-3 (min.76) Clure, tras rechace del portero

4-4 (min.88) Luis en una preciosa chilena


¿Quieres recibir un email cada vez que se publique una entrada nueva?

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.